Con un trabajo sobre superficies inestables se consigue una mejora del equilibrio, la estabilidad y la fuerza propioceptiva.
El trabajo en superficies inestables tiene varios factores positivos, uno de ellos es la rehabilitación de lesiones, ya que mejoran la eficacia sensorial a nivel articular, tanto del tiempo de reacción muscular, como en la activación de la musculatura agonista-antagonista, produciendo una mejora en la protección del complejo articular. Por otro lado, ayudan al buen desarrollo de la región central del cuerpo que es vital para la mejora del rendimiento deportivo. La región central está formada por los músculos que rodean el centro de gravedad. Estos incluyen los abdominales, los músculos de la cadera, y la musculatura de la columna lumbar, dorsal y cervical. El rol principal de la musculatura de la región central es proveer estabilidad al cuerpo. Una región central fuerte y estable proporciona el vínculo necesario para la transferencia de las tensiones que se transmiten desde la base, ya sea desde el tren inferior al superior o viceversa. Esta transferencia de tensiones se hace evidente en la capacidad de los atletas para correr, realizar fintas, saltar, lanzar, golpear y batear.
Las investigaciones garantizan que el uso de superficies inestables provoca el incremento de la activación de la musculatura de la región central y también la activación articular en aquellas zonas cercanas a la superficie inestable.
Diferentes tipos de plataformas inestables:
- Bosu.
- Fit-ball.
- Powe Plate.
- Rodillo de espuma.
Aquí en Illes disponemos de cada uno de estos tipos de superficies inestables, para que puedas fortalecer tu zona central y por tanto poder alcanzar tu objetivo de una forma segura, o tratar de rehabilitar algún tipo de lesión articular. NO DUDES EN CONSULTAR A NUESTROS INSTRUCORES ELLOS TE AYUDARÁN A REALIZAR EL TRABAJO CORRECTAMENTE.